"Ohhhh me equivoque..."

Esta semana estuve confrontado en mi corazón, y esta frase redundó tantas veces en mi mente, lo más serio es que me costó reconocerlo. Te has puesto a pensar cuantas veces te equivocas en un día, ahora haz cuentas y piensa cuantas veces en una semana y luego al mes, al año y durante toda tu vida.... ¿Cuántas veces? ¿No es un número muy grande? Si me dices que solo tienes cinco equivocaciones durante toda tu vida, solo te voy a decir, que te quites la máscara de perfección, porque no te queda... lamento informarte que te has equivocado muchas veces. Lo que sucede es que nuestro orgullo, nuestra idea de aceptación no permite que reconozcamos que nos equivocamos. Y lo peor de mi caso, es que me sucedió con Dios, admitir que me había equivocado fue terrible. Por eso inicie este blog con esa forma, "confrontación", directa de mi Dios hacía mí... Estuve equivocado durante mucho tiempo, y de muchas formas con respecto a Dios, lo que yo quería contra lo que el quería, lo que en mi pensamiento era lo necesario, contra lo realmente necesario para Dios. Una de las cosas más interesantes que empece a descubrir fue el fuerte y necio sentimiento de que yo se que "estoy bien", "no hago nada malo", "yo no me equivoco"... En estos días leía mi Biblia y mientras oraba y meditaba me dí cuenta que estaba equivocado con respecto a mi "relación" con Dios, había dado por sentado muchas cosas, que Dios debía darme, o que el tenía la obligación de darme; o por otro lado que yo no tenía que hacer tales o cuales cosas. Lo más increíble de esta confrontación fue, cuando Dios trajo a mi mente: "cuantas veces has dicho, "me equivoque"", ni delante de Dios, ni delante de mi familia, ni delante de nadie... Es triste eso... podemos salvar muchas cosas si tan solo fueramos humildes en reconocer que nos equivocamos, no somos perfectos, pero en eso consiste la gracia de Dios, en reconocer que nos equivocamos, que somos humanos porque Dios se engrandece en nuestra debilida en nuestro reconocer que nos equivocamos....

Luego de eso... pude decir convencido... "Dios..... me equivoque..."

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