Errores

La vida es un conjunto de decisiones que transcurren continuamente como continuo es el tiempo. Sin duda alguna, todas y cada una de ellas (las decisiones) tendrán consecuencias buenas (beneficios) y consecuencias malas (simplemente consecuencias), creo que está demás la aclaración pero debía hacerla. Nadie te prepara para tomar decisiones, creo que incluso los grandes cursos sobre toma de decisiones en los negocios nunca te preparan para las decisiones que realmente importan: las personales. 

• ¿que estudiaré?
• ¿con quién me casaré? 
• ¿dónde viviré?
• ¿dónde trabajaré? 
• ¿con quién haré negocio?
• ¿que haré con mi vida? 
• ¿que amigos tendré? 

Son algunas de las preguntas que contestamos día con día tomando decisiones. Al tomar una opción, discriminamos todas las demás y consideramos como óptima aquella que elegimos, y decimos que fue una buena decisión cuando obtenemos excelentes beneficios de ella, sin embargo cuando elegimos mal, sufrimos las consecuencias de nuestro error al decidir. 

Pero ¿puede un error marcar el resto de mi vida?, creo que muchos tienen la respuesta en la punta de la lengua, "claro que no", todos tenemos segundas oportunidades. Pero ¿qué de aquellas decisiones que marcaron incluso nuestra vida personal y tenemos que sobrellevar algún tipo de sufrimiento? Y es que las consecuencias son independientes de las oportunidades. ¿A qué me refiero? Supongamos que inicié una relación de noviazgo con alguien que no me convenía, nos llevamos pésimo, nos herimos y al final cortamos. Tengo una oportunidad para tener una relación realmente sana con otra persona, pero pretender que las malas situaciones que viví con mi anterior pareja desaparezcan de la noche a la mañana, es prácticamente una ilusión, probablemente será deleble, pero no serán inmediatas. 

Sin embargo, hay otras decisiones que podemos llegar a tomar y que cambiarán el rumbo completo de nuestra vida, que no podemos regresar al punto de tomarla de nuevo. ¿en este caso que toca? Como me lo dijo un amigo: "Tenés que reconocer que no volverás a ese punto, no serás el mismo que eras antes de tomar esa decisión, tendrás que aprender a ver las nuevas oportunidades que tenes y buscar hacer aquello que con esas nuevas oportunidades puedes realizar". Debo indicar que ésto me hizo pensar en sobremanera, a veces tratamos de aferrarnos al "hubiera decidido esto..." lastimosamente el hubiera ni siguiera es un verbo ejecutable, como dicen "los hubieran no existen". Lo que toca es ver hacia al frente, aprender de la decisión y continuar con las nuevas oportunidades que tengo, sin aferrarme al "hubiera". 

“Esto traigo a mi corazón, por esto tengo esperanza: Que las misericordias del SEÑOR jamás terminan, pues nunca fallan sus bondades; son nuevas cada mañana; ¡grande es tu fidelidad!” Lamentaciones 3: 21-23 (Versión La Biblia de las Américas).